El 7 de junio celebramos el Día Mundial de la Inocuidad de los Alimentos, una fecha destinada a concienciar e impulsar acciones para prevenir, detectar y gestionar los riesgos asociados a los alimentos. Esta iniciativa fue instituida por la Asamblea General de las Naciones Unidas en 2018 con el objetivo de promover la seguridad alimentaria, proteger la salud humana, favorecer la prosperidad económica, apoyar la agricultura, facilitar el acceso a los mercados, impulsar el turismo y contribuir al desarrollo sostenible.
Cada año, alrededor de 600 millones de personas enferman debido a cerca de 200 tipos diferentes de enfermedades de transmisión alimentaria. Dichas enfermedades afectan desproporcionadamente a las personas pobres y a los jóvenes, provocando aproximadamente 420,000 muertes evitables cada año.
En Alimento Para Todos estamos convencidos de que resguardar y vigilar la inocuidad de los alimentos nos ayuda a salvar vidas. No sólo se trata de un componente esencial de la seguridad alimentaria, sino que también desempeña un papel crucial en la reducción de enfermedades.
En este sentido, el eslogan de este año es “Inocuidad Alimentaria: Prepararse para lo inesperado” y se destacan siete mensajes clave para comprenderlo a fondo.
- La colaboración multisectorial garantiza una respuesta eficaz: la cooperación entre agencias gubernamentales, autoridades nacionales y el sector industrial contribuye a minimizar el impacto de los eventos de inocuidad alimentaria en la salud pública.
- El rápido intercambio de información salva vidas: el intercambio rápido y preciso de información entre todas las partes de la cadena de suministro puede facilitar la identificación de la naturaleza y el origen de los incidentes de inocuidad alimentaria.
- La comunicación eficaz mantiene la confianza en el suministro de alimentos: resulta esencial proporcionar información precisa, oportuna y transparente a todas las partes interesadas, el sector de la salud, los medios de comunicación y el público en general.
- Los Sistemas de Gestión de la Seguridad Alimentaria (SGSA) ayudan a proteger a los consumidores: productores, importadores, fabricantes, distribuidores y minoristas de alimentos deben establecer y actualizar continuamente estos sistemas.
- La acción decisiva de las empresas alimentarias beneficia a todos: la industria necesita estar preparada para implementar planes y estrategias de respuesta a emergencias, incluyendo procedimientos para la retirada de productos, así como sistemas de trazabilidad.
- Todos somos administradores de riesgos: desde individuos hasta empresas y gobiernos, todos evaluamos los riesgos de inocuidad alimentaria en nuestras decisiones diarias.
Desde la banca de alimentos trabajamos todos los días con el fin de preservar la integridad de las cadenas de valor que alimentan a todas las personas. Nos insertamos en los procesos de gestión, producción y suministro alimentarios adheridos a estrictas normas de operación para mitigar continuamente los riesgos que pueden comprometer la salud de nuestras comunidades. Además, aprovechamos periódicamente nuestro contacto con organizaciones y grupos de ayuda mutua para desplegar campañas educativas respecto a este tema. Creemos que todos, sin distinción, tienen derecho a una alimentación segura y nutritiva.
