En un gesto que trasciende el mero acto filantrópico, Audemars Piguet ha demostrado que la excelencia técnica y la conciencia global son dos elementos que coexisten en una misma visión. Su compromiso con la solidaridad atraviesa fronteras y su impacto reverbera en la vida de miles de personas. En este caso, su aporte beneficiará significativamente a los sectores más vulnerables de la Ciudad de México y otras partes del país.
Mediante una generosa contribución, Audemars Piguet extiende su visión de sustentabilidad al ámbito social. Esta donación, es la primera que Alimento Para Todos recibe de una empresa europea y marca un hito en la lucha contra el hambre. Por otra parte, también subraya el poder de la colaboración internacional para transformar realidades.
Estos fondos nos permitirán ampliar de manera sustancial seis programas clave, impactando a más de 160,000 personas de manera constante, quienes enfrentan hambre e inseguridad alimentaria en el Valle de México y otras partes del país:
- Rescatar y redistribuir alimentos en óptimas condiciones, reduciendo el desperdicio y garantizando dietas balanceadas.
- Proveer comidas diarias a trabajadores de la Central de Abasto y comunidades en situación de vulnerabilidad.
- Distribuir mochilas con alimentos no perecederos y útiles escolares para prevenir el abandono educativo.
- Producir alimentos de larga duración (pan molido, tortillas, quesos) mediante modelos de economía circular.
- Entregar artículos de higiene, ropa y capacitación a organizaciones aliadas para ampliar su alcance.
- Invertir en procesos de construcción de capacidades para empoderar y promover comunidades autosuficientes.
Además, como donataria autorizada, garantizamos que cada contribución se canalice con eficacia, cumpliendo con los estándares legales y fiscales que inspiran confianza en donantes y beneficiarios. Esto nos permite optimizar el uso de los fondos y garantizar transparencia en cada acción.
Con episodios de altruismo como este, podemos ir más allá de la distribución de alimentos. Nuestra operación rescata, reinventa y educa. De esta forma buscamos redefinir nuestro sistema alimentario. En este sentido, este evento es un recordatorio de que la lucha contra el hambre requiere de soluciones colectivas, audaces y sin fronteras.
En un mundo donde el hambre sigue siendo una deuda pendiente, gestos como el de Audemars Piguet nos recuerdan que el cambio es posible. Desde Suiza hasta México, queda claro que cada esfuerzo conjunto y cada mano extendida puede traducirse en oportunidades concretas.